Violencia obstetrica impacto psicologico en personas gestantes

Violencia obstétrica, impacto psicológico en personas gestantes

Según la  OMS, la violencia obstétrica   es   aquella   que   sufren   las   mujeres   durante   el   embarazo   o   el   parto   al   recibir un maltrato físico, humillación y abuso verbal, o procedimientos médicos coercitivos o no consentidos.   

Este tipo de violencia puede involucrar desde el personal que presta servicios de salud en instituciones públicas y privadas, acompañantes durante el embarazo, el parto y puerperio, hasta categorizar cualquier conducta o acto como una deficiente atención médica (un trato cruel, denigrante o discriminante) u omisión que provoque a las personas gestantes una afectación física y/o psicológica, que en casos extremos puede llegar a provocarles la pérdida de la vida, ya sea de ella, del feto o del recién nacida/o. 

Estudios realizados por personal investigador del Instituto de Salud Pública (INSP) han documentado la violencia hacia las mujeres durante la tención del embarazo, parto y puerperio y se identificaron frases como: 

“Pregunté por la causa de la muerte de mi bebé, pero no quisieron darme una explicación” 

“Recuerdo vagamente que me dio una hoja de papel para firmar y tomó mi mano para poner mi huella digital sin ninguna explicación” 

“Si estamos aquí, es solo porque no tenemos dinero” 

Entre las situaciones de violencia que experimentan las mujeres durante la atención obstétrica son: 

• Maltrato físico 

• Humillación 

• Abuso verbal 

• Procedimientos autoritarios para imponer algún método anticonceptivo o para realizar una cesárea 

• Violación a la confidencialidad

• Obtención de consentimiento de manera involuntaria   

• Deficiencia en la información de procedimientos obstétricos  

• Negación al tratamiento 

La violencia obstétrica, así como otras formas de violencia contra la mujer, representa un problema importante en el marco de los derechos de las mujeres y la lucha contra todas las formas de violencia de género.

Según la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH  2021), se observa que las mujeres que fueron atendidas en el sector público experimentaron mayor porcentaje de maltrato psicológico y/o físico (19.2 puntos porcentuales) que las que fueron atendidas en el sector privado.  Asimismo, en el sector público les realizaron mayor porcentaje de tratamientos médicos no autorizados que en el sector privado (la diferencia es de 13.4 puntos porcentuales).   

Son 17 las entidades federativas con una prevalencia de violencia obstétrica mayor a la nacional (31.4%), siendo San Luis Potosí (38.9 %), Tlaxcala (38.5 %) y Ciudad de México (38.5 %) las de mayor porcentaje.   

En la psicología una de las principales preocupaciones que se tiene durante el embarazo es el momento del parto ya que puede ser un evento lo suficientemente estresante como para desencadenar un trastorno de estrés postraumático que puede desarrollarse en depresión posparto, en este caso existe la posibilidad de generar un trauma complejo que tiene los siguientes síntomas (Herman, 1992): 

•  Vergüenza y culpa crónica 

•  Sensación de una pieza incompleta

•  Sensación de ineficacia/sentirse incomprendido 

•  Minimizar la importancia de los acontecimientos 

Las consecuencias de no recibir una atención psicológica pueden provocar un estado de depresión posparto, el síndrome de la cuna vacía o una desvinculación emocional con la y/o el bebé. La depresión posparto tiene consecuencias significativas para el crecimiento de la y/o infante ya que son propensos a tener problemas emocionales o de comportamiento, dificultades para dormir o para comer, llanto excesivo y retrasos en el desarrollo del lenguaje. 

Por lo que el acompañamiento psicológico brinda la oportunidad de abrir espacios de escucha activa, respetuosa y activa para generar mayor bienestar en la persona gestante, permitiendo vivir la maternidad de una forma acorde a sus deseos al liberarse del juicio que impone el discurso social de la “buena madre”. Sin embargo, no se debe perder de vista que el malestar que acompaña a la vivencia de la maternidad no es privado, sino que corresponde al orden de lo social.  

Si tu o alguna conocida necesitan recibir apoyo en este sentido, acérquense a un profesional que les pueda ayudar a transitar esta etapa de la mejor manera y apoyarles en lo que necesitan; en Psicoterapia Integral tenemos profesionales que te pueden acompañar.

 P. E. García D. A.

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